
La Guardia Costera norteamericana anunció hoy que finalmente pudieron sellar el pozo de la British Petroleum, causante de uno de los más grandes desastres ecológicos de los que hay recuerdo.
Hasta ahora la mancha de petróleo ya contaminó 160 kilómetros de las costas de Luisana y todos los esfuerzos por controlar el flujo de petróleo y gas habían sido en vano.
Si bien todavía no hay certeza si el derrame está totalmente controlado (hay que recordar que la operación de sellar la tubería rota se hizo a 1500 metros de profundidad) esta es la primera señal de que la catástrofe estaría cerca de controlarse.
Cabe agregar que quizás lo único positivo de todo este enorme desastre es que obligó al presidente Barack Obama a prolongar la moratoria de perforaciones petroleras en las costas de ese país durante seis meses.
Fuente: AFP